El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, entregó una condecoración post mortem a Fernando Villavicencio, que aspiraba a la Presidencia de la República y fue asesinado el pasado 9 de agosto luego de un mitin en Quito. El decreto resalta la lucha contra las mafias, la valentía y el legado del político, periodista y sindicalista.

Villavicencio realizó más de 250 investigaciones periodísticas que sirvieron para abrir casos en contra de altas autoridades del Estado por delitos en contra de la administración pública. Por ejemplo, sus reportajes denominados “Arroz Verde” fueron claves para la condena de varias figuras del correísmo, incluyendo al ex presidente Rafael Correa.

En los considerandos del decreto, donde se argumenta el otorgamiento de la condecoración, se recoge que “durante su fructífera vida profesional, (Fernando Villavicencio) denunció y contribuyó con información relevante de casos de corrupción en materia petrolera, minera, eléctrica y de telecomunicaciones, que involucraron a Instituciones del Estado, así como del accionar de estructuras criminales que han causado grave detrimento a la seguridad y a los recursos públicos”.

Las investigaciones de Fernando Villavicencio revelaron casos de corrupción durante el gobierno de Rafael Correa

Asimismo, el texto del Ejecutivo resalta la labor que Villavicencio realizó mientras fue presidente de la Comisión de Fiscalización del Congreso: “Presentó en ese período diez informes de fiscalización, presidió 16 juicios políticos, tuvo como eje de su gestión el frontal combate a los procedimientos inmorales de malversación de fondos y una firme determinación para abordar los problemas más acuciantes del país”.

En 2021, Villavicencio llegó al Legislativo apoyado por una alianza entre el Partido Socialista Ecuatoriano y el movimiento Concertación. Ganó en las urnas como asambleísta nacional y fue elegido para liderar dicha comisión. Mientras fue legislador denunció a algunos de sus compañeros (varios de la bancada correísta) pues aseguró que tenían planes para atentar contra su vida.

Cuando Lasso decretó la disolución cruzada, en mayo de este año, Villavicencio fue el primero en anunciar su deseo de participar en los comicios extraordinarios. A pocos días de esas declaraciones, el movimiento Construye hizo público el respaldo a su candidatura. El político “estructuró su campaña alrededor de la lucha contra las mafias de los sobornos, del narcotráfico y de la minería ilegal en el Ecuador”, según argumenta el documento. Villavicencio fue acribillado a 11 días de las elecciones.

Fernando Villavicencio se postuló para la Presidencia apoyado por el movimiento Construye (REUTERS/Henry Romero/File Photo)

Según el decreto suscrito, “es deber del Estado ecuatoriano y del Gobierno Nacional reconocer los méritos y virtudes del señor Fernando Alcibiades Villavicencio Valencia, su honestidad, valentía y decidida actuación en precautelar los valores en que debe sustentarse el quehacer público, y por dejar un legado de esperanza a la ciudadanía ecuatoriana en general”.

El grado de Gran Cruz es una de las más altas condecoraciones que otorga el Ecuador a quienes hayan realizado actos de servicio o de representación del país en los campos civil, militar o policial. Las condecoraciones del Orden Nacional al Mérito cuentan con seis grados. El más alto es el Gran Collar, que ha sido entregado solo a tres personas: al ex presidente de Uruguay, José Mujica; al ex presidente de Perú, Martín Vizcarra; y a Tamim bin Hamad Al Thani, el actual emir de Qatar. A este grado le sigue el recibido por Villavicencio; y las menciones de Gran Oficial, Comandante, Oficial y Caballero.